Algo tan sencillo como un baño completo con agua de diversas plantas puede ser un remedio fabuloso contra los picores. La ortiga abre los poros, la verbena expulsa las toxinas, y la flor de saúco favorece la sudoración.
Ingredientes:
5 l de agua
2 puñados de ortiga
2 puñados de verbena
2 puñados de flor de saúco
1 kg de sal marina
1 vaso de vinagre de manzana
1 puñado de bicarbonato
Preparación:
Ponemos el agua al fuego, y cuando empiece a hervir añadimos las tres plantas. Lo dejamos dando un hervor a fuego lento durante 4 minutos, y después lo colamos.
Ya sólo queda preparar la bañera con agua a unos 37º, echar el cocimiento de plantas, añadir la sal marina, el bicarbonato y el vinagre, y removerlo todo bien.
Uso:
Tomaremos el baño a 37º durante un cuarto de hora. A continuación iremos subiendo la temperatura hasta llegar a los 41-43º, algo menos (39 o 40º las personas delgadas o con tendencia a tener la tensión baja). Hemos de mantenernos en esta agua caliente unos minutos. Por último, una buena rociada de agua fría y adiós a los picores.
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