Manchas amarillas en antigua mantelería de hilo
Si las manchas son pequeñas, tener paciencia y hacer lo siguiente: tomar un hisopo de los que se utilizan para los oídos y humedécelo en lejía rebajada con agua. Aplicar sobre cada mancha y exponer al sol del mediodía, cubiertas con jabón blanco. Si al enjuagar abundantemente aún hay un atisbo de color amarillento, repetir cuantas veces sea necesario. He blanquedo con este método mantelería dada por arruinada, de más de 100 años de antigüedad. El mismo procedimiento se puede aplicar sobre sábanas y demás ropa blanca. Tened especial precaución sobre los monogramas, bordados y aplicaciones.
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