Pieles secas y estropeadas

Hacerse el propio jabón en casa es una tradición milenaria que se está perdiendo. Sin embargo, no es complejo y resulta muy gratificante.

Ingredientes:
250 g de sosa cáustica
1,5 l de agua
1,5 l de aceite de oliva virgen
250 g de avena molida

Preparación:
Mezclamos el agua y la sosa cáustica en una palangana y removemos el preparado 2 o 3 minutos en el sentido de las agujas del reloj, para evitar que se corte.
A continuación se le añade el aceite, que funciona de ácido para la sosa, y se sigue removiendo en la misma dirección. Entonces, por último, se añade la avena, que es lo que aromatizará el jabón. También se le pueden agregar unas gotas de esencia de lavanda.
Lo echamos todo en un bol y lo dejamos reposar de manera intermitente hasta que la mezcla espese. Es lo que se denomina cuajo. Sabremos que está listo cuando, al dejar una cuchara goteando sobre la mezcla, las gotas queden marcadas en la superficie.
Lo dejaremos endurecer durante 1 o 2 días (dependiendo del lugar y de la temperatura); para desmoldarlo es aconsejable haber utilizado un recipiente de plástico o papel parafinado y tenerlo un rato en el congelador. Ya podemos cortarlo en pastillas, pero éstas aún habrán de secar durante un mes antes de usarlas, para que el proceso químico termine y desaparezca cualquier traza de sosa cáustica.

La sosa es un material tóxico; por lo tanto debemos tomar una serie de precauciones:
- Mantener una distancia prudencial.
- Verter el agua con cuidado.
- Tener a mano vinagre de manzana y agua por si hay salpicaduras.
- Evitar las emanaciones tóxicas de la sosa cáustica.
- Ventilar la habitación.
- Utilizar guantes de látex y gafas protectoras.
- Remover con una pala de madera.
- Evitar la presencia de niños y animales.

Uso:
Gracias a la avena, esté jabón está indicado para pieles secas y estropeadas. Se recomienda también para trastornos cutáneos como la soriasis.
No sólo sirve para la piel, sino también para el pelo, e incluso para la ropa.
Además, es un excelente “lubricante” para los cajones de los armarios que quedan atascados.
Cambiando el aceite de oliva virgen de la fórmula original por aceite de cocina usado se conseguirá un buen jabón para la ropa, aunque no servirá para la piel.

No hay comentarios: